TIPOS DE SUELO

ALBARIZAS

Dentro de la Zona de Producción se distingue la Subzona de Calidad Superior, constituida por terrenos ondulados y de gran blancura llamados albarizas y situados principalmente en la Sierra de Montilla y los Moriles Altos. Las albarizas son suelos ricos en carbonato cálcico, pobres en materia orgánica, formados por margas blandas, de estructura hojaldrada o grumosa, muy profundos y con un elevado poder retentivo de la humedad. En estos suelos, las raíces de la cepa se desarrollan principalmente en los primeros setenta centímetros de profundidad, si bien la raíz principal puede llegar a sobrepasar los cuatro metros de fondo. Se consideran los suelos de mayor calidad para los vinos generosos y de licor de Montilla-Moriles, y por ello se exige que de dicha subzona proceda un porcentaje mínimo de las existencias de vino sometido a crianza.

ARENAS ROJAS

Las Arenas son suelos fuertemente rojizos de hasta dos metros de espesor, que tienen debajo un horizonte o capa blanca muy rica en caliza. Son suelos de perfiles profundos con un horizonte superficial de textura limosa a franco arenosa, estructura grumogranular, permeable, muy porosos y de color rojo. En su superficie presentan un gran número de cantos rodados. Estos suelos predominan en la parte occidental del marco de la Denominación de Orige, y en menor medida también en el centro. Los suelos rojos y pardorrojizos suponen un 15% de los viñedos del marco, se desarrollan sobre areniscas calizas en posiciones fisiográficas llanas, de topografía plana con pendientes inferiores al 2% y situados entre los 300-400 metros de altitud.

RUEDOS

Los suelos vertisoles denominados en la zona “bujeos” se desarrollan sobre margas del Mioceno en posiciones fisiográficas de vaguada con topografías más o menos onduladas, pendientes entre 2-16% y 240-300 m de altitud. Estos suelos pueden presentar algunos factores limitantes para el cultivo del viñedo tales como textura arcillosa e hidromorfismo, pendiente y erosión.

ZONA SIERRA DE MONTILLA

La zona de Calidad Superior denominada Sierra de Montilla lo componen terrenos de Montilla y de la zona limítrofe de Castro del Rio y de Cabra. Son terrenos procedentes del Cretáceo formado por tierras Margosas altamente calizas. El Cretáceo es un terreno muy interesante desde el punto de vista vitícola, porque muchas de las zonas que producen los más afamados vinos de Francia son naturaleza geológica cretácea. En el Marco de Montilla-Moriles se llama “Sierra de Montilla” a la parte más elevada y oriental del término, es decir a la parte de relieve más pronunciado y que se destaca a lo lejos desde la población de Montilla. En el término de Cabra y de Castro del Rio también pertenecen a la “Sierra de Montilla”, por su identidad de los suelos sobre terrenos de naturaleza geológica cretácea, y por su análogo y prominente relieve con suelos altamente calizos de gran calidad.

ZONAS ALTOS MORILES

Los Altos de Moriles se componen por suelos altamente calizos y formados sobre  la tosca hojaldrada del Oligoceno superior. Posee una estructura geológica que transmite al suelo que de ella se deriva en condiciones xéricas, y que explican muchas de las excepcionales propiedades físicas de este suelo de viñedo de inmensa calidad. El terreno Oligocénico de una edad geológica muy distinta al Cretáceo, de la Sierra de Montilla, aunque los materiales sean en ambos casos margosos y altamente calizos. Difícilmente cabe imaginar que se junten más características favorables para la cepa de viñedo en un clima cálido y seco que las que aportan el suelo excepcional y el suelo singularísimo de los Pagos de Moriles.